A pesar de haber experimentado en primera persona los prejuicios y la falta de oportunidades, hoy Gabriela cuenta con empleo estable, que le ha permitido mostrar sus capacidades.
Gaby, como le dicen sus amigos y compañeros de trabajo, es una joven independiente y con mucha energía, que llegó a la fundación hace algunos años atrás y participó de los talleres de formación con un objetivo claro: entrar a trabajar.
Debido a algunas dificultades motoras, Gabriela es usuaria de silla de ruedas y si bien eso no es un problema para ella, las barreras ambientales sí lo han sido: ascensores fuera de servicio en el metro, calles en mal estado o la ausencia de rampas, han sido muchas veces el panorama al cual se ha tenido que enfrentar, sin embargo, eso nunca la hizo desertar de su deseo de encontrar un empleo.
En la actualidad Gabriela tiene contrato indefinido en su empresa, luego de haber pasado por el proceso de cualquier trabajador, es decir, entrevistas y periodos de prueba, en el cual demostró su capacidad y sobre todo su compromiso. Su trabajo consiste en digitar datos y realizar una serie de labores administrativas, para lo cual se traslada todos los días desde su casa a su oficina, demostrando a todos su perseverancia.
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